El presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC), Karim Qubain, expresó su preocupación ante las recientes declaraciones de la presidenta Xiomara Castro sobre la posibilidad de una deportación masiva de hondureños desde Estados Unidos.

Qubain enfatizó que "Estados Unidos es nuestro principal socio comercial y cooperante estratégico. Creemos que, a través del diálogo y el respeto con el nuevo gobierno del presidente Donald Trump, podemos mantener una relación armoniosa y explorar soluciones para evitar una deportación masiva de hondureños".

Además, subrayó que la diplomacia debe prevalecer en todo momento. "No se puede poner en riesgo una relación histórica que tanto beneficio ha traído a Honduras. Hacemos un llamado al Gobierno de Honduras para que agote todas las vías de comunicación diplomática y evite medidas extremas que podrían generar más perjuicios, no solo para los migrantes hondureños en Estados Unidos, sino para el país en general".

En relación con la base aérea José Enrique Soto Cano, conocida como Palmerola, Qubain destacó su relevancia histórica para Honduras. "La base aérea Palmerola ha sido un pilar importante, especialmente en momentos de crisis como desastres naturales, brindando apoyo humanitario y salvando vidas. Su presencia en nuestro país ha fortalecido la cooperación con Estados Unidos y no representa ninguna amenaza", aseguró.

El líder empresarial también manifestó la gran preocupación del sector privado ante la posibilidad de una deportación masiva. En este sentido, consideró vital intensificar los esfuerzos entre el sector público y privado para ofrecer soluciones internas que generen oportunidades de empleo tanto para los hondureños desempleados como para aquellos que podrían regresar al país.

"En la CCIC siempre mantenemos nuestras puertas abiertas para contribuir a una mayor inversión y generación de empleo. Hemos trabajado junto a la Embajada de los Estados Unidos en programas de cooperación que impulsan oportunidades para emprendedores y jóvenes. La principal responsabilidad es nuestra: unámonos para construir un Honduras donde nadie quiera irse, porque nadie debería arriesgar su vida ni separarse de su familia. Esa debe ser nuestra meta común", concluyó Qubain.