El Partido Liberal, segunda fuerza de oposición, decidió no incorporarse de nuevo a la mesa del diálogo instalado en agosto, con la coordinación de la ONU, para superar la crisis surgida por un presunto fraude en las elecciones generales de noviembre de 2017.

El secretario del Consejo Central Ejecutivo del Partido Liberal (CCEPL), Octavio Pineda, dijo que debido a la falta de respuestas en algunos temas, ese colectivo desistió de incorporarse al diálogo tras retirarse a finales de septiembre pasado.

"Esperamos respuestas por parte del Partido Nacional" en relación a otorgar una amnistía a los "presos políticos" y consultarle al pueblo sobre la reelección presidencial, añadió.

"Sentimos prepotencia y arrogancia, no nos dejan expresar lo que queremos en las mesas", subrayó Pineda, quien tildó al diálogo como un "monólogo".

El 26 de septiembre el Partido Liberal anunció el retiro de sus representantes del diálogo por la intervención del Registro Nacional de las Personas, aprobada un día antes por el Parlamento hondureño.

La intervención del organismo fue aprobada con el apoyo de 111 votos a favor, incluidos 17 del Partido Liberal, y 10 en contra, 2 abstenciones y 5 no votaron de los 128 diputados que integran el Parlamento hondureño.

El Registro Nacional de las Personas es el encargado de inscribir e identificar a la ciudadanía mediante la entrega de cédulas de identidad, la inscripción de los recién nacidos y además emite los certificados de defunción.

Tras conocer la decisión del Partido Liberal, el ministro de la Presidencia, Ebal Díaz, dijo que espera que los representantes de ese colectivo resuelvan sus inconvenientes y vuelvan a la mesa del diálogo.

"Una vez más el Gobierno se ha hecho presente a las mesas del diálogo político, seguiremos esperando que los participantes que se han comprometido resuelvan sus inconvenientes y vuelvan a las mesas de trabajo", indicó Ebal en Twitter.

Representantes del Gobierno, de los partidos Nacional y Liberal, así como de Salvador Nasralla, excandidato presidencial de la Alianza de Oposición contra la Dictadura, han venido participando en el diálogo político para superar la crisis postelectoral.

Nasralla no reconoce las elecciones del 26 de noviembre, en las que fue reelegido Juan Orlando Hernández, aduciendo que hubo fraude.

Como parte del diálogo, se han instalado cuatro mesas de trabajo centradas en temas sobre derechos humanos, reformas electorales y constitucionales, el tema polémico de cómo fueron las elecciones y los resultados de violencia pre y postelectoral.